BODEGA

Nacido en Argentina de padres franceses, el amor por el vino de Patricio Gouguenheim comenzó a la edad de 7 años, cuando su padre comenzó a dejar que probara algo en las comidas mezcladas con agua con gas. Pero no fue hasta 2002 cuando encontró la bodega de sus sueños en Tupungato, una antigua propiedad con excelentes vistas de la cordillera de los Andes, un sistema de riego y suelo realmente único. En el interior, una gran cantidad de pequeños tanques de hormigón, perfectos para hacer vinos de alta calidad. Era el lugar perfecto, así que Patricio decidió abandonar una Carrera exitosa en finanzas para convertirse en un productor de vinos y comenzar con su bodega familiar.

Otro espumosos dulce de malbec que nos gustó mucho este años es este elaborado con uvas de Tupungato. De color asalmonado con reflejos rojizos, recuerda a frutos rojos frescos y bollería. En boca su dulzor es intenso aunque se equilibra gracias a una acidez elevada. final largo con regusto frutal que combina a la perfección con un buen pan dulce.